Diego Marín A.

Un banco, una papelera, un aparcabicis, alcorques, jardineras, expositores, unas vallas o, incluso, el cerramiento de un contenedor también pueden ser reciclados. Ecoembes y el Gobierno de La Rioja promovieron años atrás la adquisición de mobiliario urbano reciclado con ayudas de hasta el 75% de la inversión municipal para los Ayuntamientos riojanos. De esta manera se incentivó «el uso de mobiliario urbano y otros productos elaborados a partir de los residuos de envases de plástico generados en La Rioja».

La iniciativa se incluyó en el marco de la colaboración entre el Ejecutivo regional y Ecoembes «para divulgar entre los ciudadanos los beneficios que reporta la recuperación y el reciclado de los envases de plástico, latas y ‘bricks’ (contenedor amarillo) y el papel y cartón (contenedor azul)». El fin de la medida era «no sólo mejorar la gestión de los residuos y fomentar el uso de materiales reciclados, impulsando la actividad y el empleo del sector del reciclaje, sino también contribuir a la lucha contra el cambio climático, teniendo en cuenta las peculiaridades de las pequeñas y medianas empresas de La Rioja». Y es que en nuestra región existen empresas que se dedican al reciclaje del plástico.

Mobiliario urbano

Ecoembes suma ya más de veinte años coordinando el reciclaje de envases en España «con el objetivo de preservar nuestro entorno natural y una iniciativa como ésta resulta una manera de cerrar el círculo del reciclaje y demostrar que los residuos realmente pueden tener una segunda vida. De hecho, el mobiliario urbano reciclado ofrece un resultado similar a los fabricados con materiales nuevos. En una primera convocatoria, en el 2012, municipios como Albelda de Iregua, Arnedillo, Galilea, Gimileo, Hervías, Igea y Navarrete invirtieron, en conjunto, 28.288 euros, una media de 4.000 euros, en la adquisición de mobiliario urbano reciclado, obteniendo, por tanto, 16.973 euros en concepto de ayudas. Además, el parque de ‘paleoaventura’ El Barranco Perdido de Enciso también cuenta con mobiliario urbano fabricado con residuos de envases de plástico.

Mobiliario urbano

Cada riojano deposita una media de 14,2 kilos de envases ligeros en el contenedor amarillo y 23,4 kilos por habitante de papel y cartón en el contenedor azul. Con estas cifras, correspondientes al 2014, se recuperaran más de 12.000 toneladas de envases. La instalación de mobiliario urbano reciclado supone cerrar el círculo que comienza con el depósito de envases en los contenedores adecuados para su reutilización. Y lo mejor es que esos bancos, papeleras, jardineras, etc. fabricadas con materiales reciclados pasan totalmente desapercibidos por su moderno y eficaz diseño.

Por ejemplo, en el entorno de la pasarela peatonal sobre el río Iregua que conecta los municipios de Villamediana y Lardero en el paraje denominado El Molino de Abajo, junto a la Vía Romana, el Gobierno de La Rioja instaló mobiliario urbano fabricado con plástico reciclado por una de las empresas que se dedican a este sector en nuestra comunidad. Incluso es posible fabricar este tipo de mobiliario con las populares cápsulas de café, por lo que conviene concienciarse de su separación y reciclaje para que tengan un nuevo uso.

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