Innovación


1997: Hace dos décadas nadie podía adivinar la evolución exponencial que la sociedad riojana ha protagonizado en una región que ha sabido transformar en una ventaja para avanzar su humilde dimensión frente a otros que lo hubieran convertido en un hándicap

2017: La Rioja ha apostado por el progreso, con la FRIcomo agente básico e integrador que ha sabido implicar a los cuatro actores protagonistas de este cambio radical:Administración, empresa, universidad y sociedad

Texto: Luismi Cámara

LLa Rioja. Tierra de profundas tradiciones, de campos de verduras, de vides, de sabiduría popular, de fuertes anclajes con el pasado... y de firme e intensa mirada hacia el futuro y la innovación, hacia lo que se quiere ser y hacia dónde se quiere evolucionar. Porque este amarre a lo antiguo, al fundamental acervo social y cultural de una región pequeña pero de historia intensa, no es más que un suelo estable y consistente en el que apoyar los pies para tomar impulso y no perder el paso en un mundo global, sin fronteras, y que avanza a una velocidad de vértigo, en el que no apostar por evolucionar implica inevitablemente quedarse atrás.

En este envite decidido, la Fundación Riojana para la Innovación (FRI) se ha convertido en uno de los principales protagonistas para asumir, potenciar y hacer crecer este compromiso. Fue constituida en febrero de 2010 para convertirse en herramienta básica para difundir la cultura de la innovación como herramienta de desarrollo social y económico de La Rioja y, desde sus inicios, ha tenido claro que debía basar su éxito en la implicación de cuatro actores protagonistas: Administración, empresa, universidad y sociedad.

La consejera de Desarrollo Económico e Innovación, Leonor González Menorca, asume que «las cuatro se entrelazan y se hibridan. La suma de sus fuerzas multiplica resultados de tal manera que la evolución de todas ellas va en paralelo.Con ello, se consigue crecer en La Rioja de una manera equilibrada, ordenada y sostenible».

Siempre positivos

Así ha sido, y todos ellos han sabido ver en la humilde dimensión de esta comunidad una ventaja frente a lo que otros aprovecharían como excusas para dejar de intentarlo y abandonar. Frente a los grandes proyectos, imaginación. Frente a las enormes inversiones, originalidad. Frente a medios inalcanzables, talento.

La consejera valora la labor «divulgativa» de la FRI y el «gran trabajo» realizado para conseguir «que cada vez más empresa y personas conozcan y se interesen por la innovación». «Prueba de ello –añade–, son las más de 100 actividades puestas en marcha y por las que han pasado más de 20.000 asistentes». Esta labor formativa ha conseguido concienciar «cada vez a más empresas de la importancia de innovar para mejorar y generar productos y servicios de mejor calidad. Desde el 2014 la tendencia se ha ido consolidando y se ha incrementado el número que invierte en ello en 18,8 puntos porcentuales».

Pero para innovar no sólo hay que mirar adelante. Es fundamental también desviar la vista hacia abajo, a los más pequeños, a los adultos del mañana. Educar a los jóvenes es construir las bases de un prometedor porvenir. Y así lo han hecho en la FRI, apostando por la First Lego League –un evento para niños de entre 9 y 16 años del saldrán los ingenieros, científicos, programadores…– y acogiendo su fase final nacional en Logroño.

De ellos es un futuro que González Menorca ve «en positivo, dada la apuesta de las empresas. Somos conscientes que el Gobierno debe desempeñar un papel de facilitador, favorecer la coordinación de los distintos agentes de forma dinámica y catalizadora. Desde esta perspectiva, y considerando los planes con actuaciones concretas que hemos venido desarrollando, parece lógico que el entorno innovador de La Rioja se vea favorecido. Siempre hay que ser positivo».

La FRI se mueve


Enrique Pelegrín. FRI

Si no se innova, no hay futuro


Una sociedad que avanza y se desarrolla es una sociedad innovadora, o dicho de otra forma, una sociedad que innova, avanza y se desarrolla más y a mejor ritmo que una sociedad que no lo hace; de ahí la importancia de fomentar la innovación en todos los ámbitos de la sociedad, en todas la edades y en todas las áreas de la vida civil y empresarial.

Divulgar y fomentar la innovación, como herramienta de desarrollo social y económico de La Rioja, en la cultura, en la salud en el turismo, en la ingeniería, en todo. Esa es la razón de ser de la Fundación Riojana para la Innovación, una fundación que gracias al empuje y el apoyo de sus 45 patronos, colabora en crear un caldo de cultivo para fomentar un ecosistema innovador en La Rioja, que nos permita crecer de manera sostenible y racional.

Para ello la Institución desarrolla anualmente un programa de actividades diverso que tiene como misión sensibilizar, promover y difundir la cultura científica, la innovación, el avance tecnológico y el espíritu emprendedor.

Y en esta labor titánica se implican la administración, la universidad y las empresas, sin perder de vista que el porqué de todo esto es devolver a la sociedad parte de lo que la sociedad nos da a los que formamos parte de estos colectivos.

«Vamos por el buen camino para conseguir estar dentro de las sesenta mejores regiones europeas, pero todavía nos queda mucho trabajo»

Siete años después de que la Fundación Riojana para la Innovación comenzase, se van viendo los frutos del trabajo realizado, más de 100 actividades y 25.000 asistentes y participantes son una buena muestra de que la innovación importa en La Rioja y a los riojanos. Hace dos años pocos conocían lo que es la Liga Lego, un evento de innovación para jóvenes de 9 a 16 años, en el que se mezclan, altas dosis de talento para diseñar utillajes que aplicados a robots programados por ellos resuelven diferentes desafíos, con proyectos de investigación científica que planteen soluciones innovadoras a retos muy exigentes; hoy somos la tercera provincia de España con más participantes y hemos organizado la Gran Final Nacional en las que participaron 600 jóvenes, de este torneo que cuenta con más de 12.000 participantes en toda España y más de 1.600 equipos, y de ahí saldrán los futuros ingenieros, científicos, programadores…

Hace siete años la innovación no era una prioridad para las empresas, hoy, como nos muestra el Innobarometro, instrumento realizado por la Fundación, en colaboración con la Federación de Empresarios, para medir la percepción que la sociedad en materia de Innovación, 8 de cada 10 empresas innovan y lo seguirán haciendo.

Además llevamos cuatro ediciones del Foro de la Innovación un evento bienal que se ha convertido en referente en España. La primera edición se presentó bajo el lema ‘Sin innovación no hay futuro’, la segunda se centró en la cooperación como fórmula para innovar, la tercera en el binomio ‘Innovación y Emprendimiento’ y la cuarta giró en torno a la bioeconomía y la industria conectada. Por él han pasado 200 ponentes de primer nivel, al que han asistido presencialmente más de 7.500 personas y que ha contado con más de 7900 seguidores a través de vídeo streaming, de sitios tan dispares como Amsterdam, Canadá, Atenas, Santiago de Chile, Buenos Aires, Bogotá y los exóticos parajes de Hawaii y Groenlandia.

Vamos por el buen camino para conseguir estar dentro de las sesenta mejores regiones europeas, pero todavía nos queda mucho trabajo por hacer y cuando consigamos nuestro objetivo deberemos seguir perseverando ya que «Sin Innovación, no hay futuro».